Por: . - 15/07/2024
Desde que se publicaron las primeras investigaciones sobre los daños que ocasionaba la azúcar refinada a diferentes órganos del cuerpo, se han creado diferentes alternativas y sustitutos con los que se puedan endulzar las comidas y lograr un efecto menos perjudicial al organismo.
Muchas de estas opciones han sido aprobadas por la Administración de Alimentos y Medicamentos de EE.UU. (FDA, por sus siglas en inglés), encargada de regular los productos derivados, paradójicamente, a pesar de ser dañinos para la salud.
De acuerdo con Newsweek, seis de estos sustitutos del azúcar que se consideran peligrosos recibieron su aval desde 1970 para salir al mercado y según recientes estudios se ha podido comprobar que algunos de estos edulcorantes artificiales podrían causar graves daños en el intestino.
En el intestino habitan bacterias que favorecen la eliminación de sustancias pero los edulcorantes cambian su función. Foto: Freepik Foto: Freepik ¿Qué pasa si se consumen endulzantes artificiales?
El sitio web mencionado cita los resultados y declaraciones de unos científicos de la Universidad Anglia Ruskin del Reino Unido, quienes descubrieron que además de la sacarina, la sucralosa y el aspartamo hay un cuarto edulcorante que afecta las paredes del colon y transforma las bacterias “buenas” que allí habitan.
“Esto puede provocar una serie de posibles problemas de salud, como diarrea, inflamación intestinal e incluso infecciones como la septicemia, si las bacterias entraran en el torrente sanguíneo”, aseveró Havovi Chichger, profesor asociado de ciencias biomédicas de la Universidad Anglia Ruskin.
Hay muchos productos que se identifican como "sugar free" pero contienen edulcorantes. Foto: Freepik. Foto: Lustre`360
Los investigadores precisan que lograron identificar que el neotamo, que es hasta 13 mil veces más dulce que la azúcar refinada, provoca los siguientes estragos: Aumento de la muerte celular
Filtraciones en las paredes del intestino
Alteración en el comportamiento de las bacterias inofensivas, que a su vez provocarían diferentes enfermedades como: diarrea, inflamación, infección y el Síndrome de colon irritable.
De este estudio se desprende la importancia de revisar bien las etiquetas y la composición de los alimentos que compre, ya que no solo se trata de los edulcorantes; muchos productos incluyen estos sustitutos del azúcar en sus ingredientes sin notificarlo en la parte frontal.
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