El joven futbolista Lamine Yamal, estrella del FC Barcelona, cumplió el 13 de julio los 18 años y ya tiene en su poder un regalo que ha dado la vuelta al mundo: una cadena de oro y diamantes valorada en 400 mil dólares, obsequio del cantante urbano dominicano El Alfa.
La exclusiva joya fue elaborada por Tajia Diamonds, una casa de alta joyería con sede en Nueva York, y es una de las piezas más ostentosas que ha recibido un deportista en el último año. Según publicó la revista Hola, el diseño no solo destaca por su costo, sino por los significados ocultos en cada detalle.
Así es la cadena de Lamine Yamal: lujo a medida
La cadena tiene un diseño altamente personalizado:
Los eslabones están recubiertos de diamantes en corte brillante.
En cada unión hay incrustaciones de flores de diamantes con pétalos de oro, donde destacan rubíes rojos y zafiros azules, un guiño directo a los colores del FC Barcelona.
El colgante central es un enorme LY, por las iniciales de Lamine Yamal, completamente cubierto de diamantes y piedras preciosas.
La cadena incluye un eslabón especial con las cifras 304, el código postal de Rocafonda, el barrio humilde de Mataró donde creció el futbolista, como recordatorio de sus orígenes.
«La mejor pieza para el mejor futbolista del mundo. Felicidades, leyenda», publicó El Alfa junto a las imágenes del collar. «Gasto 400K en el cuello, Dios te bendiga», añadió el artista, confirmando el costo del regalo.
¿Una celebración o un contrato de silencio?
La polémica alrededor del cumpleaños no se queda en el lujo del collar. La modelo Claudia Calvo reveló en el medio Vozpópuli detalles sobre la organización de la fiesta privada: según contó, se invitó a 12 mujeres seleccionadas por estándares físicos específicos, a quienes se les ofrecieron entre 10 mil y 20 mil euros en viáticos y gastos pagados.
Las condiciones:
No se podía llevar celular.
La ubicación del evento se mantenía en secreto hasta último momento.
Las invitadas no debían hacer preguntas sobre el evento.
Tolerancia cero con drogas.
«Te decían que todo estaba incluido, pero no te decían qué esperaban de vos. Solo que había que ser discreta», afirmó Claudia Calvo.