Sectores vulnerables inundados por efectos de la tormenta Melissa

Desde tempranas horas de la tarde del jueves en el sector Los Ríos, a pocos metros de la cañada Las 800, en los callejones La Piscina y La Gallera, varias viviendas se inundaron durante el paso de la tormenta tropical Melissa, producto del desbordamiento de los arroyos que las rodean.

La desesperación invadió a los residentes de este sector que, desde las 6:00 de la tarde, tuvieron que salir de sus viviendas debido a que estas quedaron completamente inhabilitadas.

Todavía sin poder creer lo sucedido, Elizabeth contó que tuvo que buscar ayuda de vecinos para salir con sus dos hijos menores de 12 años de su vivienda.

“No sabía qué hacer, llamé a los vecinos y ellos me ayudaron a cargar los niños para sacarlos; me desesperaba porque casi no los podría ver por el agua, mi esposo estaba trabajando y yo sola con ellos, no supe qué hacer y entré en pánico”, relató Elizabeth recordando cómo por unos minutos pensó que perdería a sus dos pequeños en medio de agua que cubría su vivienda.

Varios vecinos del sector permanecen sacando sus ajuares dañados y el agua contaminada que cubrió lo que fue su residencia y ahora deben partir a casas de familiares y vecinos.

Otro afectado por las inundaciones fue Gervasio Encarnación, de 85 años, quien reside solo en su casita y, en medio de las tronadas y del aguacero, empezó a sacar toda el agua que dañó sus ajuares.

Para evitar que se dañaran todas sus pertenencias, las amarró con una soga al techo de zinc.

“Me acosté tarde sacando el agua yo solito y se me dañaron muchas cosas de la sala y en la habitación; salvé la cama y una mesita porque lo amarré del techo para que no se mojaran porque, si no, las perdía y ya en las lluvias del 2022 perdí todo”, contó Encarnación luego de terminar de secar el agua que permanecía en la vivienda.

Miguelina Montero y Katherine Encarnación, dos vecinas que a las 10:00 de la noche del jueves el desbordamiento de la cañada afectó sus viviendas, inundándose y obligándose a abandonar su residencia.

Montero recién llegaba del trabajo, mientras su esposo dormía junto a su hija, y empezaron a escuchar los ruidos de los vecinos en pánico por las inundaciones en sus viviendas. Al abrir la puerta, el agua contaminada entró a la casa y se rebosó el inodoro.

Callejones La Piscina y La Gallera

Los residentes de los callejones La Piscina y La Gallera desde las 4:00 de la tarde se mantenían en la incertidumbre de salir de sus viviendas o permanecer en ellas hasta que el agua pasara.

“Tuve que subirme arriba de una silla junto a mi nieta de 12 años porque el agua entró a la casa y me mojó todo; cada vez que llueve mucho y la cañada se desborda, no podemos ni dormir y al otro día sacar esa agua”, explicó Yolanda, una señora de 72 años.

En medio de su desesperación, los comunitarios de los sectores vulnerables y afectados por las inundaciones piden a la Alcaldía del Distrito Nacional y a la Defensa Civil acudir en su ayuda para ser acogidos en lugares donde sus vidas estén a salvo.

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