Los niños inmigrantes separados de sus padres y sus familias, y que fueron traídos a la Gran Manzana, recibirán asistencia leal y psicológica por parte de profesionales de la Ciudad, gracias a una partida de $4.1 millones de dólares anunciada este lunes por el alcalde Bill de Blasio.

La asignación de fondos se produce luego que una delegación de abogados y trabajadores sociales de la Ciudad regresara de la frontera Sur, donde realizó trabajo voluntario por una semana ofreciendo ayuda a cientos de inmigrantes con sus casos.

El Alcalde indicó que el dinero se usará de la siguiente manera:

Aumentar la capacidad de defensa en los procesos de deportación de más de 900 inmigrantes.

Incrementar la financiación del trabajo social de asistencia a jóvenes y niños inmigrantes traumatizados.

Proveer de recursos para evaluar necesidades legales de los miembros de las familias que buscan ser patrocinadores de los niños separados en las instalaciones federales en la ciudad de Nueva York para sacarles de esos centros.

El grupo, conformado por 15 profesionales de agencias ligadas a la Ciudad que viajó la frontera, pudo evaluar de primera mano la situación de estas familias, y es por ello que ahora se destinan más fondos para ayudarlas. Entre los que se trasladaron la pasada semana hasta Dilley, en Texas, se encontraba la comisionada de Inmigración de la Ciudad, Bitta Mostofi.

“Muchos niños separados que fueron traídos a nuestra ciudad fueron reunidos con sus familias en la frontera, pero siguen abandonados allí en centros de detención”, afirmó Mostofi.

Los voluntarios fueron recibidos este lunes por la primera dama de la Gran Manzana Chirlane McCray, quien indico que los servicios de la Ciudad “son un ejemplo de nuestro compromiso con la reunificación y asesoramiento a familias inmigrantes separadas por las políticas inhumanas del Gobierno federal“.

Entre tanto, el alcalde De Blasio enfatizó: “Las madres y padres tienen derecho a poder abrazar a sus niños y consolarlos”.

“La crueldad de la Administración Trump es antiamericana y no se asemeja a los valores de la ciudad de Nueva York, que está ayudando a estas familias y hace un llamado al Presidente para reunir a los más de 400 niños que permanecen separados”, añadió De Blasio.

La ayuda fue posible gracias a donaciones privadas hechas a través del Fondo del Alcalde para el Desarrollo de la Ciudad y organizada por la Oficina de Inmigración.