Un chófer  apresado con tres meses  como medida de coerción declaro que es inocente del hecho en que perdió la vida una joven estudiante universitaria, cuando se desmontaba de la guagua que manejaba y que había salido de la Universidad cargada de estudiantes que cursaban diversas carreras en esta institución de altos estudios superiores.

Yo no tengo la culpa, ella fue la que se tiro de la Guagua, yo no tengo que ver con su muerte, expuso el chófer  de la guagua, declaró el prevenido y chofer, Eusebio Toribio, residente  en Angelina de la ciudad  de Cotui. 

Toribio conducía el autobús de donde cayó la estudiante de medicina Cristi Celeste Martínez Sanz, de 20 años de edad, quien regresaba de la Universidad Católica Nordestana (UCNE). La occisa falleció la noche del pasado lunes a causa de una muerte cerebral cuando recibía atenciones médicas en un centro de salud privado de esta ciudad. 

La muerte de la joven Martínez Sans a causado gran consternación en la población francomacorisana y del país, ya que la occisa era una estudiantes de alto índice académico y que era muy aceptada en la sociedad por su personalidad.