Los transportistas de mercancías hacia localidades vecinas de Haití con esta provincia mantienen paralizados sus servicios, mientras tanto el intercambio comercial entre decenas de negociantes dominicanos y haitianos se celebró este lunes con normalidad, aunque con una fuerte vigilancia militar y agentes de la Policía Nacional y municipales.

Los propietarios de los camiones que transportan mercancías hacia Haití organizados en la Federación Dominicano del Transporte (FENATRADO), reiteran que hasta que no les garanticen sus vidas y las propiedades no volverán a visitar comunidades como Juana Méndez, Gilea y Gonaives.

Hace varias semanas, grupos de rebeldes haitianos que realizaban protestas callejeras ultimaron de un balazo a un sargento de la MINUSTAH e hirieron a un policía haitiano, pero al mismo tiempo saquearon varias patanas llenas de artículos variados, y propinaron golpes a algunos choferes de los vehículos. 

Luego de esos sucesos, tanto el secretario general del Sindicato de Camioneros en esta provincia, Geovanny Escotto, como Blas Peralta, de FENATRADO, ordenaron a sus afiliados no aventurarse en penetrar a tierras haitianas, hasta que se les garantice su integridad física y las mercancías que transportan. 

Funcionarios diplomáticos dominicanos y haitianos se reunieron y prometieron que diligenciarían ante sus superiores el pago de los daños ocasionados a las unidades transportistas y de las mercancías robadas. No obstante, hasta el momento no se ha informado si esa recompensa fue pagada. Durante los mercados binacionales de lunes y viernes que se realizan por esta parte de la República Dominicana con el vecino Haití, se movilizan decenas de millones de pesos. Además, cientos de personas son utilizadas para transportar los productos en carretillas, mulos, caballos y a pie.