Aunque las camas de hospitalización para pacientes con Covid-19 registran una alta ocupación, que en el sector privado rondaba ayer el 69% y en la red pública un 31%, en los centros de aislamientos habilitados por el Estado para personas con el virus que deben hacer cuarentena y no puedan estar en el entorno familiar, la ocupación de camas era mínima.

 Ayer, de acuerdo al monitoreo oficial sólo 304 camas de aislamiento se encontraban en uso, de un total de 4,166 habilitadas  por el Gobierno, para una ocupación del 7% de la capacidad.

El país tiene disponible 3,862 camas en los  centros de aislamientos ubicados en diferentes puntos del país. A estos centros son trasladadas personas que deben guardar cuarentena,  entre ellos viajeros; personas positivas que viven en lugares muy hacinados y privados de libertad para evitar contagios masivos en los centros penitenciarios, entre otros.

No obstante, tradicionalmente los pacientes se niegan a ser llevados a lugares de aislamiento a concluir la cuarentena establecida como protocolo del virus, a fin de no ser apartados de sus familiares.

Mayor ocupación

La mayor ocupación la registraban ayer las camas instaladas en las Unidades de Cuidados Intensivos  (UCI) destinadas a pacientes con Covid-19, con un total de 329 pacientes ingresados, de los cuales 199 estaban en centros privados para una ocupación del 64% de las habilitadas y 130 en centros públicos para una ocupación del 56% de las disponibles.  La ocupación general en conjunto de camas de intensivos era ayer de 61%.

En camas de hospitalización de cuidados intermedios o regulares para Covid, la ocupación general era de un 47%, subiendo a un 69% de las habilitadas en clínicas privadas y de un 31% en hospitales públicos. El total de camas habilitadas en el país para ingresar pacientes con el virus es de 2,736, de las cuales se encontraban en uso 1,275.

En cuanto a los ventiladores, el  monitoreo oficial destaca que ayer había 183 equipos ocupados de los 397 que dispone el país para pacientes con el virus del Covid-19, para una disponibilidad de 214.  La mayor ocupación la registra el sector privado que es del 49% de los equipos disponibles y en la red pública es de un 43%, para una ocupación general de 46%.

Detalles están contenidos en el monitoreo de actualización que lleva a cabo la Dirección de Gestión de Información del Servicio Nacional de Salud (SNS) que incluye centros de la red pública, del sector privado, de las Fuerzas Armadas y la Policía Nacional.

Ayuda OPS para vacunas

Preocupada por el auge de la pandemia, la Organización Panamericana de la Salud prometió que el Fondo Rotatorio de la OPS “desempeñará un papel clave en este proceso”, ayudando a los países a adquirir vacunas, jeringas, equipo de cadena de frío y otros suministros para la aplicación de las vacunas.

La directora explicó que 18 países han preparado planes nacionales de despliegue de vacunación y 23 han completado la Evaluación de Preparación para la Vacuna.

“Para la OPS, la introducción exitosa de la vacuna no debe medirse simplemente en función de la temporalidad, sino a través de la perspectiva de la equidad. No debemos dejar que las campañas de vacunación se fracturen por falta de equidad que ha dejado huella en la salud de nuestra región”, afirmó la experta.

“El despliegue de vacunación debe dar prioridad a aquellos que están en riesgo, como el personal de los servicios de salud en la primera línea de respuesta, los adultos mayores y las personas con padecimientos preexistentes. También deben dar prioridad a las poblaciones las marginadas, para las cuales usualmente es difícil acceder a la atención que requieren”, añadió Etienne.

SEPA MAS

Abinader promulga leyes

Ley de Compras

 Ayer, el presidente Luis Abinader promulgó la Ley 6-21 que modifica la Ley de Compras para liberar la compra de vacunas en caso de pandemia, peligro de epidemia o epidemia declarada, para su tratamiento y erradicación, en el marco de un Estado de Excepción en su modalidad de Estado de Emergencia.

Ley patrimonial

El mandatario también promulgó la Ley 7-21 que establece un el régimen tributario especial al reincorporar las disposiciones de la Ley 46-20, del 19 de febrero de 2020, sobre transparencia y revalorización patrimonial y sus modificaciones